Hoy es día de cuartos de final para la selección; hoy nos enfrentamos a Perú, a los dirigidos por ‘el tigre’ Gareca. Hoy es viernes de partido de Colombia, hoy se engendrarán nuevos beneficiaros para el sistema del Sisbén (el Obama Care tercermundista, o mejor, “ley-cien-mundista”); hoy los municipios sonríen gracias a sus ‘aguardienteros’ monopolios y, con esa sonrisas, nuevos adultos aprovecharán el Sisbén para curarse una que otra puñalada, de pate cabra o machete, por supuesto. Hoy habrá una linda noche en Cuadra Picha, ganemos o perdamos.

Perú eliminó a Brasil jugando un buen partido y seguramente querrán repetir la hazaña contra Colombia con el siguiente equipo (probablemente):

PER - CACUn 4-2-3-1 o un 4-1-4-1 diseñado para atacar por los costados y finalizar con Paolo Guerrero, su mejor jugador y máximo goleador. La idea es aprovechar a Vílchez y a Cueva, ambos de muy buena técnica y despliegue físico, como interiores para hacer superioridad numérica en las bandas y permitir que los extremos Flores y Polo busquen profundidad en ataque. Cueva tiende a ubicarse más de enganche, detrás de Guerrero que el 16 peruano y los laterales se proyectan en ataque moderadamente. En defensa arman un 4-1-4-1 para presionar en la mitad del campo y un 4-5-1 cuando deben retroceder y defender cerca a su área.

Para los segundos tiempos pasan a un 4-2-3-1, si necesitan mejor dinámica ofensiva, con el ingreso de Yotún (que podría ser titular) por Balvin o el volante principal de marca. De esa forma sueltan a Cueva definitivamente como ’10’ para buscar más posibilidades en ataque.

Pékerman tendrá que ser muy inteligente para darle a sus jugadores las mejores herramientas para pasar a Semifinales sin tanto sufrimiento. Acá le dejo unos pequeños tips al cuerpo técnico, y a ustedes, que algo aportarán frente a un compromiso ambiguo, que no se sabe será fácil o sufrido.

1. Nada de comernos el cuento que Colombia TIENE que salir a atacar frenéticamente: Nuestro querido y carcamal DT tendrá que hacer uso de su experiencia como pensionado para no permitir que sus jugadores se enfrasquen en el juego estratégico que los Peruanos quieren plantear. Gareca y sus dirigidos están todos achicopalados y cabizbajos, con mirada embustera, afirmando que Colombia es superior, que James, Ospina y compañía son cracks de talla mundial incluso, ídolos para todos ellos; con dichas afirmaciones ellos esperan, con la alfanje del contragolpe en la mano, que Colombia salga a acreditar tales falsos cumplidos buscando desesperadamente el gol y ofrezca espacios para que ellos puedan verse favorecidos en ataque. No debemos caer en esa trampa.

2. Nuestro mediocampo debe prevalecer: No es sorpresa para nadie que la forma más efectiva para bloquear el funcionamiento ofensivo de Colombia es obligando a que el balón esté lo más posible en los pies de nuestros centrales y nuestros volantes de marca sin que tengan la opción de entregárselo a nuestros 3 volantes de ataque. Por lo tanto, sea cual sea la pareja de contención (Sánchez-Torres, Torres-Celis, Sánchez-Torres, etc.), debemos tener la capacidad para contrarrestar esa estrategia con balones largos, pases precisos o trasportando correctamente el balón en esa zona del campo. Yo pienso que si sacamos adelante esa parte del juego, los cuatro de arriba y los laterales se las arreglarán para rematar a gol, generar penaltis, tiros de esquina y balones quietos peligrosos.

3. ‘Chichada guerrillera’ para el que no presione cuando no se terminen las jugadas: Aun tengo en la memoria el gol que nos marcó Argentina en Barranquilla. Teófilo, con todo el equipo en proyectado en ataque pierde un balón cerca al área rival y nos anotan un doloroso gol, pero no olvidaré el haragán trotesito de Macnelly Torres para presionar. Perder un balón en ataque puede suceder y es normal, pero con el equipo jugado en ataque, todos deben presionar y hacer el esfuerzo de recuperar el balón, o al menos, retrasar el contragolpe rival. Así que nada de ausentismo de carácter legislativo a la hora de presionar. Solo Chopin y nada de salsa choque para el que no presione al perder el balón en ataque.

4. Que la jerarquía obtenida en Europa y el Mundial jueguen a favor: Hay una verdad compartida entre selecciones como Perú, Ecuador, Venezuela y Colombia: siempre tenemos nuestra pifia o desconcentración por partido, siempre hay una mala entrega, un error en marca en un tiro de esquina, un mal rechazo de balón, una opción clara de gol desperdiciada, una ‘colombianada’. Esas colombianadas son producto de la falta de jerarquía y fortaleza mental de los jugadores; fortaleza mental que tienen Argentina, Uruguay y Brasil gracias al recorrido de sus jugadores en las ligas más competitivas y con mayor presión del planeta. La selección de Pékerman cuenta con varios jugadores que ya han vivido un mundial, partidos importantes en ligas UEFA e incluso en fases finales de Champions League o Europa League; lo que representa una ventaja que tenemos sobre Perú, que ya cometió su ‘colombianada’ empatando un partido contra Ecuador cuando iban ganando por dos goles. Esta vez debemos tener esa pizca de concentración y tranquilidad extra para que nosotros seamos los que ejecutamos el castigo a esa falencia tan conocida.

Ojalá ganemos y este grupo siga con la oportunidad de estar más tiempo trabajando junto, de cara al futuro cercano. Ha estado linda la Copa América pero el mundial es más lindo aún.

Glosario:

  1. Chichada Guerrillera: Acto penitente que sufre aquel que lo merece. Consiste en una serie de coscorrones o golpes en la cabeza (a veces con llaves o monedas) del penitente por parte de un grupo de personas de carácter sádico. Ese grupo de personas es el mismo que decide si el penitente merece la chichada u otros medios de castigo, por el motivo sea.

¿Ustedes qué le recomendarían al cuerpo técnico de la Selección? Como siempre, están bienvenidas sus opiniones y comentarios en mi cuenta de Twitter @SantiCabG. Los invito a compartir esta columna y este blog con todos sus amigos y enemigos, en todas sus redes sociales ya que eso me ayudaría muchísim; se los agradezco y nos vemos con el análisis después del partido.