Las frasesitas de Instagram
Yo entiendo la estrategia de aglomerar la consciencia colectiva bajo un mismo ideal; en este caso, la campaña de “Con la Fe intacta” para enfrentar a Perú. Sube el ánimo del equipo y los une con un solo objetivo. Sin embargo, para mí, esa es una frasesita de amiga sobreactuada en Instagram; tal y como la siguiente:
Los sellos en el pasaporte son los tatuajes del alma
¿Qué es esa ridiculez? Uno siguió a esa amiga en redes sociales para saber si tiene novio, para conocer a sus amigas o para saber cómo se ve en bikini; no para leer mensajitos que ella ni siquiera redactó y que solo sirven para promover “líderes emprendedores” de empresas multinivel o para hacernos saber que “ya no hay caballeros como antes”.
Me desvié del tema… el caso es que la Fe es un concepto que, en mi caso (y sin querer sonar agnóstico), no puede ir en detrimento de la inteligencia y de la obligación que tiene nuestra selección de hacer las cosas bien, sobre todo tácticamente. Por esto yo cambiaría la frasesita de cajón por algo más por el estilo de “con la Fe y la táctica”.
Perú de Gareca, el fruto de la paciencia
Esta selección es un ejemplo de paciencia retribuida con resultados; en su momento pudieron sacar al DT, por resultados flojos, pero lo aguantaron porque su selección hacía el esfuerzo de jugar bien. El tigre Gareca ha alternado entre dos sistemas, manteniendo la misma idea: Un 4-2-3-1 y un 4-1-2-3 en el que el juego de toque en corto rápido es la premisa principal. Ellos vinculan jugadores rápidos con pasadores capaces y muy trabajadores, con uno de los centrodelanteros más eficaces de Suramérica.
Cuando quiere ser muy ofensiva, Perú utiliza a Luis Advíncula de lateral en sociedad con Carrillo; además retrasan a Tapia para formar un triangulo con Cueva y otro volante ofensivo (Hurtado, Peña, Ruidíaz, Reyna o Yotún adelantado). Cuando buscan equilibrio, Corzo es la opción de marcador de punta derecho y optan por dos jugadores en el eje con Tapia y un volante mixto (usualmente Yotún).
Bien planteado desde el inicio.
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Ya fue un hecho que don José, jugando en su casa, nunca se impuso estratégicamente contra su DT rival. De visita ha sido algo diferente, contra Ecuador, Chile y Paraguay se evidenció lo claro que el cuerpo técnico tenía el partido y cómo se debía jugar; contra Brasil y Uruguay la historia fue muy distinta. Esto nos lleva a pensar que, incluso sabiendo que el contragolpe es nuestra fortaleza, no siempre lo hemos podido ejecutar correctamente en tierras ajenas.
En muchos casos, Pékerman ha corregido para los segundos tiempos y hemos conseguido resultados en los últimos muchos. Sin embargo, con lo visto en nuestro último partido, no quisiera que el juego se definiera en los últimos minutos; sinceramente, no confío en la entereza emocional de nuestros jugadores. El partido debe plantearse correctamente desde el comienzo; las improvisaciones, con el desajuste anímico que generan en nuestros jugadores, serían un “Seppuku” en Lima.
Amenaza y contención en bandas.
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Tal y como lo mencionamos en este análisis empezando Eliminatorias (léalo acá), contra Perú, el juego en las bandas es clave. No obstante, en esta ocasión somos visitantes y debemos preocuparnos más por contrarrestar el ataque de ellos que por imponernos ofensivamente. Con esto en mente, a pesar del nivel que le hemos visto a la dupla Arias-Cuadrado, la dupla que me parece está en desventaja es la de Fabra-Cardona. Es por esto que me gustaría ver a un volante con la capacidad física de apoyar a Frank Fabra por mas de medio partido sin fundirse; ojalá ese mismo volante sea capaz de generar peligro en el contragolpe. Lastimosamente, Teófilo, Giovanni y Muriel también carecen de tenacidad y despliegue físico para marcar en la banda.
James o Chará podrían ser. Incluso, si Farid Díaz está en buenas condiciones, en determinado momento lo tendría a él de marcador de punta y a Fabra de volante, unos metros adelante.
Guerrero con Dávinson.
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No contaremos con Cristian Zapata y Paolo Guerrero es exactamente el tipo de delantero con el que Óscar Murillo ha sufrido en la selección. Rondón, Suárez, Morata y Lezcano lo han hecho ver flojo al momento imponerse físicamente y sacan lo peor de él. Aún así, y por no llamar al quinto defensa central, pienso que Óscar está más habituado para este tipo de partidos que William Tesillo. Es por esto que, de ser posible, Dávinson (quien ya se probó con delanteros como Andy Carrol) debe ser el jugador que referencie al delantero peruano la mayor parte del tiempo.
Eso sí, ambos deben estar muy concentrados, porque Perú sorprende, ocasionalmente, con balones directos a las espaldas de los centrales para aprovechar la potencia y definición de su goleador histórico.
Escenarios claros.
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Carecemos de un DT en la cancha; ya no están Yépes, ni Leonel ni el Pibe. Ya, de un día para otro, ningún jugador tendrá la relevancia en el grupo para transmitir instrucciones tácticas o reforzar ideas dentro del campo. Por lo tanto, los jugadores y suplentes ya deben saber, de antemano, cómo responder desde lo anímico y lo estratégico ante las posibles situaciones que se presentarán en un partido definitivo; que además tiene el ingrediente de los demás juegos simultáneos y los escenarios que puedan representar.
Si van ganando, deben saber que hay que gestionar. En caso de empate, con los resultados favorables, deben saber que hay que gestionar. Si hay (ojalá no sea así) que empujar, ellos tienen que saber qué tanto arriesgar. No podemos estar de nuevo a la merced del ‘moméntum’ anímico carente de razón. Pékerman debe ser muy activo en esta fase del juego, así la garganta no le de para gritar.
¿Qué le recomendaría a Pékerman?
¿Usted qué haría para mejorar el estado emocional del equipo?, ¿le daría otra oportunidad a Cardona para marcar contra Perú?, ¿quizás a Giovanni? Están invitadísimos a unirse al debate en nuestro Twitter @FutConTilde y nuestro Facebook. Gracias por leer y no olviden compartir esta columna y blog (los botones de compartir están arriba) con todos sus amigos. RT, Like, Compartir, todo es bien recibido, ¡saludos y a ganar!
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