A lo que vamos a un concierto

¿Cuál es la premisa de ir a un concierto? Ver y escuchar a un artista de nuestro agrado, rodeado de otros fieles seguidores. Magnífico cantar, junto a ese ídolo musical, nuestras canciones favoritas; espectacular demostrarle al cantante o banda nuestra admiración con prendas alusivas a su discografía. Suena genial, ¿verdad?…  Pues para los “sardinos de hoy ” no; su lógica es diferente (la podrá encontrar más adelante en esta misma columna).


Yo no esperaba el mes de Marzo con ansias de un festival de música que no conozco; yo añoraba ver cómo nuestro querido y pre histórico DT, José Pékerman, iba a arreglar el regular presente de la Selección jugando en casa. Contra el equipo alterno de Bolivia en Barranquilla, todos teníamos la esperanza de ver una cancha ardiendo de calor atlanticense y repleto de goles. No vimos ni lo uno, ni lo otro.

Con el pie izquierdo (en la derecha)

El cuerpo técnico se inclinó por un 4-3-2-1, con la novedad de Cuadrado como lateral derecho para incorporar un volante ofensivo más; esto con el ánimo de ser más ofensivos. La idea era acorralar al rival, tener el balón y apelar al pase de Macnelly y James, la capacidad de desequilibrio de Muriel con Cuadrado y la llegada de Armero y Uribe. Como idea suena bien, esa era la estraegia; el problema fue su implementación en la cancha.

¿Para qué te traje?

Diario Pékerman Bolivia 2017

Actividad Muriel y Cuadrado

Con Juan Guillermo de lateral pensé que la banda derecha sería toda suya; pensé que desbordaría pegado a la raya acorde a su naturaleza. También pensé que Muriel estaría ubicado para potenciar su creciente exquisita toma de decisiones cerca al área y aprovechar su eficacia en espacios reducidos. Pensé mal.

Lo que tanto critiqué en este anterior análisis (léalo acá) se repitió: nos inclinamos a la derecha; aglomeramos a nuestros dos “encaradores” en el mismo sector, ambos en roles opuestos a los que están habituados. ‘Luisfer’ regateando en la banda y Cuadrado volcando su juego hacia el centro del campo.

Con la lesión de Muriel, Pékerman llamó a Quiñónes para que tomara su lugar, sin importar que en México está acostumbrado a la banda izquierda. ¿El resultado?, los últimos quince minutos desperdiciados con un inofensivo Uribe de lateral derecho y un Cuadrado embotellado con el recién ingresado en banda.

Bacca de ‘9’, un jugador menos

Ni siquiera tengo que poner un gráfico. Carlitos hizo tres pases en todo el primer tiempo. Yo no sé si esa fue la directriz del cuerpo técnico o simplemente negligencia suya; pero jugando contra tres zagueros centrales rivales, sin moverse a las puntas ni retroceder a pivotear el balón, ¿cómo pensaba generar espacios para rematar a gol? Es cierto que no hubo claridad en los creativos, ¡pero tampoco!, él tiene calidad para mucho más.

Segundo tiempo, perdiendo el tiempo

Diario Pékerman 2T

Formaciones 2do Tiempo

Para los últimos cuarenta minutos, Pékerman probó con tres sistemas a ver cuál le funcionaba. Si esto no es signo de confusión, entonces no sé qué lo es. El primero de ellos duró media hora, sumando aproximadamente 45 minutos con un lateral derecho que nada aportó en ataque; regalamos el equivalente a medio partido con un jugador ofensivo (sin contar con Bacca).

Luego, por fin ingresó Duván Zapata por Uribe. La idea era que se convirtiera en el punto focal de los ataques, aprovechando su fortaleza, juego aéreo y el cansancio de los rivales. Pues tampoco. Bacca no se movió de su puesto y el debutante tuvo que acomodarse en el costado derecho. Sí, Duván Zapata como segunda punta “tirado” a un costado; ilógico. Esa incoherencia duró 15 minutos más, hasta que entró Edwin Cardona, con apenas un cuarto de hora restante.

Finalmente, y después de varios intentos desesperados nos cayó un penalti del cielo; válido por tres puntos. Por fin Cuadrado pudo correr por la banda y por fin llegó ese gol que nos dio vida por un par de días más. El camino hacia el mundial aún seguía vivo.

Macnelly Torres

Diario Pékerman Bolivia 2017

Pases correctos Macenlly (Opta)

No quiero ser “mala leche” con un jugador. Pero tenemos que entender que la selección, con “Mac”, sacrifica dinámica, velocidad y llegada a cambio de tener un pasador capaz de sacar humedad de las rocas; que filtre balones de oro para sus delanteros, que rompa un sistema defensivo con su creatividad.

En este partido tuvimos un jugador que, como se ve en el gráfico, generó poco fútbol hacia las zonas donde se gestan los goles; esos que se necesitan para ganar. Para hacer 102 pases (datos de Opta) en zonas intrascendentes, mejor contar con un futbolista de otra naturaleza. Si Macnelly no está para pases profundos y precisos, ¿entonces para qué?


Volviendo a los conciertos

Esta es la lógica del Millenial para ir a un espectáculo musical:

Pagar un dinero, no para a gozar del show, sino para que otros vean que estuvo en él; que es asequible para su bolsillo (o el de sus papás). Vaciar su cuenta de ahorros para admirar a unos músicos que no figuran, por ningún lado, en su historial de Spotify. Financiar la entrada, a varias cuotas, para asistir a un festival a campo abierto, en la Bogotá más lluviosa de los últimos años con su ropa más alternativo-glamorosa. Pagar un dinero para ir a un concierto nocturno, ¡llevando puesto un sombrero!; uno grande… uno que no deja ver a los pobres veinte diablos que están detrás suyo.

Así razonamos los Millenials (y los que aspiran a serlo, habiendo superado los 35 años). A veces me da más pena ser parte de esta generación que ir a la marcha “anti corrupción” organizada por el Centro Democrático y promovida por un ex-asesino con “alias” de caricatura. Nos invito a la reflexión.


Con la primera parte de la tarea hecha, Colombia aún tenía la necesidad de sacar puntos en Quito, contra Ecuador. Sin ganar allá hace veinte años, don José nos sorprendió una vez más con la siguiente formación:

 

Idea de juego

En defensa el cuerpo técnico empleó un 4-1-4-1; en el que se complementó muy bien la fase de presión y de repliegue. Incomodamos el juego interno de Ecuador y neutralizamos su velocidad en las bandas, ¿qué más se puede pedir? En ataque jugamos a lo que estamos acostumbrados: a contragolpear por las bandas, aprovechando los espacios para correr y con una contundencia indiscutible. En este partido vimos una idea clara de juego; El DT y los jugadores sabían exactamente cómo y por dónde atacar. Esta vez don José sacó la mejor nota como estratega.

Entrega, disciplina y generosidad

En esta ocasión izan bandera Edwin Cardona y Miguel Borja por su sacrificio. Con y sin el balón, no le negaron un solo recorrido al equipo. Ninguno de los dos está acostumbrado a hacer labores tácticas, y menos en la altura; por eso lo destaco. Además quiero dar Mención de Honor para Farid Díaz, directo contribuyente en ambos goles; primero neutralizando Antonio Valencia (que lo hizo todo el partido) para ocasionar el primer contragolpe; luego aportó en su estilo, pero con claridad, en la generación del segundo gol. Fue un buen partido de todos, pero quería resalta a estos tres jugadores.

José Pékerman simetrico, por fin

Finalmente logramos generar preocupación a la defensa rival por ambos costados por igual. La sociedad James-Cardona pudo equilibrar lo que por el otro lado ya es costumbre que genere Cuadrado. De poder replicar esto en Barranquilla, sacaremos provecho de la confusión que genera un equipo capaz de hacer el daño equitativo por ambas bandas. El entendimiento entre el 10 y el 21, junto a su constante intercambio de posiciones, hicieron agua la pasiva marca ecuatoriana.

9 con movilidad

José Pékerman Borja

Intervenciones – Miguel Borja

Miguel Borja demostró que al estilo de la selección le conviene un delantero como él. Uno que no escatima diagonales y movimientos para intervenir en el juego o abrir espacios a los compañeros. Así como en el pasado Miguel Borja no estaba entre mis preferidos, hoy me convenció de lo contrario y hago un llamado de atención a Carlitos Bacca con el siguiente dato, proporcionado por Opta.

Contra Bolivia, con el 74% de posesión y 606 pases, Bacca intervino en 15 ocasiones. Contra Ecuador, con el 43% y 315 pases, Borja intervino en 37 ocasiones.

Para terminar

Sorpresivamente estamos de segundos en la tabla de Eliminatorias, encaminados al mundial. Aún tenemos deuda con el juego en casa y esos puntos en Barranquilla no se ganarán solos. Así como Bacca se vio mal con tata posesión de balón, José Pékerman también debe mejorar en su gestión para convertir esa estadística en su aliada, no su enemiga.

Y así como debería estar prohibido entrar a un concierto con sombreros inútiles, está prohibido el triunfalismo; aún no estamos en Rusia 2018.

Su opinión

¿Ustedes qué opinan de estos dos partidos?, ¿creen que vamos al mundial o nos quedaremos por fuera?, ¿qué jugador creen que le puede mejorar la cara a Colombia en el futuro?… Señoras y señores, Están invitadísimos a unirse al debate en nuestro Twitter @FutConTilde y nuestro Facebook. Gracias por leer y no olviden compartir esta columna y blog (los botones de compartir están arriba) con todos sus amigos. Me alegra mucho que se hayan tomado el tiempo para leer este contenido que, con mucho gusto, realizo para ustedes. ¡Saludos!